Jueves 28 de marzo de 2024 – 12:41 ET

Fitch Ratings – New York – 28 de marzo de 2024: Fitch Ratings ha rebajado la calificación de incumplimiento de emisor (IDR) en moneda extranjera a largo plazo de Panamá a ‘BB+’ desde ‘BBB-‘. La perspectiva de la calificación es estable. Al final de este comentario sobre acciones de calificación se encuentra una lista completa de las acciones de calificación.

IMPULSORES CLAVE DE LA CALIFICACIÓN

Rebaja de calificaciones: La rebaja de la calificación de Panamá a ‘BB+’ refleja desafíos fiscales y de gobernanza que se han visto agravados por los acontecimientos que rodearon el cierre de la mina más grande del país. Los grandes déficits fiscales y el bajo rendimiento de los ingresos han impulsado algunos de los mayores aumentos de la deuda pública/PIB y de los intereses/ingresos entre pares desde 2019 antes de la pandemia. Esto ha limitado el espacio de políticas anticíclicas que ya era más limitado en el contexto de la dolarización, y plantea una mayor vulnerabilidad a la luz de la fuerte dependencia del soberano de los mercados externos para su financiamiento. El cierre de la mina de cobre de Minera Panamá complica aún más las perspectivas fiscales y pone de relieve los crecientes desafíos de gobernanza, en opinión de Fitch.

Fitch espera que la mayoría de los probables ganadores de las elecciones de mayo de 2024 hagan algunos esfuerzos para abordar estos desafíos fiscales. Sin embargo, una esperada desaceleración del crecimiento, un tenso contexto social y la fragmentación de los partidos probablemente limiten el margen para una acción asertiva, y reconstruir el espacio fiscal y la credibilidad llevaría tiempo. Contrarrestando estas debilidades fiscales e institucionales, y respaldando la Perspectiva Estable, están las sólidas perspectivas de crecimiento a mediano plazo de Panamá, que Fitch actualmente no espera que se vean muy perjudicadas por el episodio minero, y se centran en las actividades logísticas y el activo estratégico de Panamá. Canal. También están respaldados por un alto PIB per cápita, una baja inflación y una estabilidad macrofinanciera anclada en la dolarización.

Cierre de mina: En noviembre de 2023, la Corte Suprema de Panamá anuló un contrato con First Quantum Minerals para la operación de la mina de cobre Minera Panamá, luego de la reacción social a la aprobación del contrato por parte del Congreso. El cierre de la mina afectará significativamente el crecimiento este año, dado que representa alrededor del 5% del PIB (a través de efectos directos e indirectos) y el 7% de los ingresos externos corrientes. También privará al gobierno del 0,5% del PIB en regalías anuales previstas y plantea la amenaza de un costoso arbitraje. Independientemente del resultado de las elecciones, sigue siendo incierto si la mina podrá reabrirse y cuándo. Y es poco probable que esto suceda rápidamente, ya que requeriría una nueva administración para lograr un cambio importante en el sentimiento popular y superar obstáculos legales, como revocar una moratoria minera recientemente promulgada.

Persisten las presiones fiscales: El déficit del sector público no financiero cayó al 3% del PIB en 2023, en consonancia con el límite de la regla fiscal (LRSF), pero rondaba el 4,5% del PIB neto de grandes ingresos extraordinarios. El presupuesto de 2024 proyecta ingresos resilientes a pesar de un crecimiento más lento y la sequía que afecta al Canal, y autoriza grandes aumentos de gasto para cumplir con los mandatos legales para educación y salarios, con un déficit implícito del 5,6%.

Las autoridades esperan subejecutar considerablemente el presupuesto para cumplir con el límite del LRSF del 2%, pero esto parece dudoso en opinión de Fitch. Fitch proyecta que el déficit aumentará al 4,7% debido a la pérdida de los gastos excepcionales, ingresos más débiles del Canal debido a la sequía, mayores costos de intereses y otros aumentos del gasto (con una subejecución menor de la supuesta por las autoridades). Estas presiones se equilibran parcialmente con los recortes al combustible y a los subsidios sociales (0,8% del PIB).

Desafíos de la consolidación fiscal: Las perspectivas de consolidación dependerán de los planes del próximo gobierno. El bajo rendimiento fiscal ha sido un desafío fiscal clave, provocando una caída de 3 puntos porcentuales en la relación impuestos/PIB hasta el 7,0% en la década hasta 2023. Se están realizando esfuerzos para abordar la evasión fiscal que podrían ayudar, pero podrían ser necesarios aumentos de tasas o recortes en las exenciones para importante mejora y, en nuestra opinión, sería políticamente difícil.

La mayoría de los candidatos han prometido esfuerzos para recortar los gastos operativos, pero puede ser difícil lograr grandes ahorros dada la demanda de mejores servicios públicos. Podría ser difícil reducir significativamente el gasto de capital, dados los desembolsos para proyectos en curso, aquellos ya completados bajo mecanismos de “pago diferido” y nuevos proyectos prometidos por la mayoría de los candidatos. El sistema de seguridad social (CSS) tiene un déficit creciente y la atención se ha centrado principalmente en formas de financiar un subrégimen (SEBD) que pronto agotará sus reservas, con poco apetito por reformas paramétricas para contener las presiones subyacentes.

Dependencia del mercado externo: Satisfacer necesidades de financiamiento relativamente elevadas dependerá en gran medida de los mercados de bonos externos y de organismos multilaterales, dado que el mercado local es relativamente poco profundo y representó sólo el 9% del endeudamiento neto en los últimos cinco años. Panamá experimentó una fuerte demanda por una reciente emisión de USD 3.100 millones, pero a costos mucho más altos, lo que pone de relieve una vulnerabilidad a nuevos cambios adversos en la confianza de los inversores. Un fondo soberano (con un capital del 1,7% del PIB) y reservas de efectivo (en su mayoría en manos de la seguridad social) ofrecen cierta flexibilidad financiera.

Creciente carga de intereses: Fitch proyecta que la deuda bruta del gobierno general retomará una trayectoria ascendente en 2024 a medida que el crecimiento se desacelere y el déficit fiscal se amplíe, saltando al 60,7% del PIB. Sobre una base consolidada (neta de tenencias de CSS), Fitch proyecta que la deuda aumentará al 56,0%, por encima de la mediana ‘BB’ del 53,9%, y a más del 330% como participación de los ingresos, muy por encima de la mediana ‘BB’ del 190%. .

Podrían surgir riesgos adicionales del endeudamiento adicional que podría ser necesario para saldar los atrasos declarados por el sector privado, o de un rescate de la SEBD en caso de que dependa del endeudamiento en lugar de transferencias de activos. Se proyecta que los intereses/ingresos aumenten a alrededor del 17,5% este año, uno de los más altos entre sus pares ‘BB’ y BBB’ y casi el doble del nivel de hace una década, debido al aumento de los costos de los intereses y la erosión de la base de ingresos.

Desafíos de credibilidad fiscal: Persisten las deficiencias en el marco fiscal de Panamá. Las autoridades no han modificado los objetivos fiscales desde una importante relajación en 2020, pero el cumplimiento ha dependido de algunas partidas puntuales y maniobras contables. Los presupuestos no están bien anclados en torno a objetivos fiscales, como se ve en el presupuesto de 2024, que autoriza un aumento importante del gasto y al mismo tiempo supone que no se ejecutará para lograr los objetivos de consolidación.

Otros mandatos legales no se están cumpliendo, incluidos marcos fiscales actualizados a mediano plazo y auditorías por parte de un consejo fiscal independiente. Las deficiencias en los datos, las revisiones históricas y los episodios de atrasos también nublan la visibilidad del panorama fiscal.

Desafíos de gobernanza: Los problemas relacionados con la gobernanza representan un desafío crediticio creciente, ya que han obstaculizado el progreso en las reformas fiscales necesarias (por ejemplo, las pensiones) y se han manifestado en importantes protestas sociales en 2022 y 2023. El puntaje mundial de gobernanza de Panamá ha caído del percentil 55 al 48 en los cinco años. hasta 2022, con grandes caídas en las subpuntuaciones de “efectividad del gobierno” y “control de la corrupción”, y es posible que aún no refleje completamente la agitación que rodea a Minera Panamá. Sin embargo, los esfuerzos de Panamá por fortalecer su régimen contra el lavado de dinero le permitieron salir de varias “listas grises” en los últimos meses.

Perspectivas de crecimiento favorables: El PIB real creció un 7,3% en 2023, cerrando en términos generales la gran brecha de producción que dejó la pandemia. Las protestas mineras tuvieron un impacto importante en la actividad, pero esto fue compensado por un sólido desempeño en otros aspectos. Fitch espera que el crecimiento se desacelere a 1,5% en 2024, reflejando un impacto directo (3pp) por el cierre de la mina y un impacto moderado de la sequía. Los efectos de segunda ronda del cierre de la mina plantean algún riesgo adicional a la baja, pero el desempeño mejor de lo esperado de Panamá en los últimos años plantea una ventaja.

El escenario base de Fitch es que el crecimiento regrese al 4,5% en 2025. Sin embargo, no está claro dónde se estabilizará la tendencia de crecimiento pospandemia de Panamá, dado el entorno de tasas de interés más altas (que afecta al sector clave de la construcción), el espacio más estrecho para proyectos de obras públicas y la efecto que podría tener la disputa en torno a la mina (un proyecto emblemático de IED) sobre la confianza y el entorno empresarial. Fitch no espera que la disputa minera socave el potencial de crecimiento, ya que afecta un enclave de la economía en lugar de las principales actividades logísticas, pero esto representa un riesgo.

Aumento de la deuda externa: El déficit en cuenta corriente aumentó a aproximadamente el 7,4% del PIB en 2023 desde el 4,4% en 2022, aunque esto se debió a la acumulación de inventarios en las zonas de libre comercio. Esto debería disminuir en 2024, contribuyendo al déficit de cuenta corriente. Sin embargo, habrá cierta presión compensatoria por la pérdida de ingresos de exportación de la mina. El déficit de cuenta corriente de Panamá tiene un historial de ajuste suave y rápido, pero ha elevado la deuda externa neta a aproximadamente el 50% del PIB a fines de 2023. Este es uno de los más altos en las categorías ‘BB’ y ‘BBB’, lo que plantea cierta vulnerabilidad a los cambios en las condiciones de financiamiento externo.

Se avecinan elecciones: Las elecciones del 5 de mayo determinarán un nuevo presidente y congreso para el próximo mandato de cinco años. Encuestas recientes muestran que el apoyo de los votantes se extendió ampliamente entre muchos candidatos, con José Raúl Mulino, del partido Realizando Metas, emergiendo recientemente como el favorito después de asumir la candidatura del ex presidente Ricardo Martinelli, quien fue descalificado. Parece probable una amplia continuidad de las políticas dada la estrecha divergencia entre los partidos de Panamá en materia económica. Sin embargo, el contexto político y social para abordar cuestiones difíciles parece desafiante dada la fragmentación de los partidos, las recientes tensiones sociales y la desaceleración económica.

ESG – Gobernanza: Panamá tiene Puntajes de Relevancia ESG (RS) de ‘5 [+]’ para Estabilidad y Derechos Políticos, y ‘5’ para Estado de Derecho, Calidad Institucional y Regulatoria y Control de la Corrupción. Estos puntajes reflejan el alto peso que tienen los Indicadores de Gobernanza del Banco Mundial (WBGI) en el Modelo de Calificación Soberana (SRM) propiedad de Fitch. Panamá tiene un puntaje percentil medio del WBGI de 48,1, lo que refleja un historial reciente de transiciones políticas pacíficas, un nivel moderado de derechos de participación en el proceso político, una capacidad institucional y un estado de derecho moderados, y un alto nivel de corrupción.

SENSIBILIDADES DE CALIFICACIÓN
Factores que podrían, individual o colectivamente, conducir a una acción de calificación negativa/rebaja
–Finanzas públicas: un aumento significativo de la deuda pública/PIB y de las cargas de intereses/ingresos, o una mayor erosión material de las condiciones de endeudamiento del mercado;

–Macro: Confianza reducida en la capacidad de Panamá para sostener tasas de crecimiento económico relativamente altas;

–Estructural: Mayor inestabilidad social o estancamiento político que afecta negativamente a la economía y las finanzas públicas.

Factores que podrían, individual o colectivamente, conducir a una acción o mejora de calificación positiva
–Finanzas públicas: Consolidación fiscal estructural que coloca la deuda pública/PIB y los intereses/ingresos en una firme trayectoria descendente;

–Estructural: evidencia de mejora de la gobernanza, por ejemplo mediante mejoras en la credibilidad y previsibilidad de la política fiscal.

MODELO DE CALIFICACIÓN SOBERANA (SRM) Y SUPERPOSICIÓN CUALITATIVA (QO)
El SRM propiedad de Fitch asigna a Panamá una puntuación equivalente a una calificación de ‘BB’ en la escala IDR de moneda extranjera a largo plazo (LT FC).

El comité de calificación soberana de Fitch ajustó la producción del SRM para llegar a la IDR final de largo plazo en moneda extranjera en moneda extranjera aplicando su Superposición Cualitativa (QO), en relación con los datos y la producción del SRM, de la siguiente manera:

–Estructural: Fitch ha introducido un nivel -1 para reflejar deficiencias en la gobernanza que no se reflejan plenamente en los Indicadores Mundiales de Gobernanza que alimentan el SRM. Esto se ha reflejado en el cierre de minas, las recientes protestas sociales y las debilidades en la gestión de la política fiscal, que es de mayor relevancia en ausencia de una política monetaria independiente.

–Macro: +1 escalón, para compensar el deterioro de la variable de volatilidad del crecimiento del PIB en el SRM debido al impacto de la pandemia, que Fitch espera que sea temporal y que, de lo contrario, agregaría un exceso de volatilidad a la calificación.

–Finanzas Públicas: +1 nivel, para reflejar que el MUR clasifica la deuda pública como totalmente denominada en moneda extranjera debido al uso del dólar estadounidense por parte de Panamá, pero el régimen de dolarización bien arraigado mitiga el riesgo cambiario en el balance soberano.

El SRM de Fitch es el modelo de calificación de regresión múltiple patentado por la agencia que emplea 18 variables basadas en promedios centrados de tres años, incluido un año de pronósticos, para producir una puntuación equivalente a una IDR de LT FC. La QO de Fitch es un marco cualitativo prospectivo diseñado para permitir el ajuste de la producción del SRM para asignar la calificación final, reflejando factores dentro de nuestros criterios que no son completamente cuantificables y/o no se reflejan completamente en el SRM.

TECHO DEL PAÍS
El Techo País para Panamá ha sido rebajado a ‘A+’ desde ‘AA-‘, +6 niveles por encima de la IDR LT FC. Este aumento refleja la opinión de Fitch de que la dolarización total de Panamá es una parte antigua y arraigada de su modelo económico, que ha alentado a las entidades del sector privado a mantener fuertes reservas de liquidez propias en ausencia de un prestamista de último recurso, y reduce la incentivos del soberano para imponer restricciones a las transferencias.

El modelo de techo país de Fitch produjo un aumento del punto de partida de +2 muescas por encima de la IDR. El comité de calificación de Fitch aplicó un ajuste cualitativo de +4 niveles a esto, según las Características Institucionales de Largo Plazo, lo que refleja la economía totalmente dolarizada de Panamá.

REFERENCIAS PARA FUENTES SUSTANCIALMENTE MATERIALES CITADAS COMO IMPULSOR CLAVE DE LA CALIFICACIÓN
Las principales fuentes de información utilizadas en el análisis se describen en los Criterios Aplicables.

CONSIDERACIONES ESG
Panamá tiene una puntuación de relevancia ESG de ‘5 [+]’ para estabilidad política y derechos, ya que los indicadores de gobernanza del Banco Mundial tienen el mayor peso en el SRM de Fitch y, por lo tanto, son muy relevantes para la calificación y un factor clave de calificación con un alto peso. Como Panamá tiene un rango percentil superior a 50 para el respectivo indicador de gobernanza, esto tiene un impacto positivo en el perfil crediticio.

Panamá tiene una puntuación de relevancia ESG de ‘5’ para Estado de derecho, calidad institucional y regulatoria y control de la corrupción, ya que los indicadores de gobernanza del Banco Mundial tienen el peso más alto en el SRM de Fitch y, por lo tanto, son muy relevantes para la calificación y son un factor clave de calificación con un peso elevado. Como Panamá tiene un rango percentil inferior a 50 para los respectivos indicadores de gobernanza, esto tiene un impacto negativo en el perfil crediticio.

Panamá tiene una puntuación de relevancia ESG de ‘4 [+]’ para derechos humanos y libertades políticas, ya que el pilar de voz y rendición de cuentas de los indicadores de gobernanza del Banco Mundial es relevante para la calificación y un factor determinante. Como Panamá tiene un rango percentil superior a 50 para el respectivo indicador de gobernanza, esto tiene un impacto positivo en el perfil crediticio.

Panamá tiene una puntuación de relevancia ESG de ‘4 [+]’ para los derechos de los acreedores, ya que la voluntad de pagar y pagar la deuda es relevante para la calificación y es un factor determinante de la calificación para Panamá, como para todos los soberanos. Como Panamá tiene un historial de más de 20 años sin una reestructuración de la deuda pública y está capturado en la variable SRM de Fitch, esto tiene un impacto positivo en el perfil crediticio.

El nivel más alto de relevancia crediticia ESG es una puntuación de ‘3’, a menos que se indique lo contrario en esta sección. Una puntuación de ‘3’ significa que las emisiones ESG son neutrales desde el punto de vista crediticio o tienen solo un impacto crediticio mínimo en la entidad, ya sea debido a su naturaleza o a la forma en que la entidad las gestiona. Los puntajes de relevancia ESG de Fitch no son insumos en el proceso de calificación; son una observación sobre la relevancia y materialidad de los factores ESG en la decisión de calificación. Para obtener más información sobre las puntuaciones de relevancia ESG de Fitch, visita https://www.fitchratings.com/topics/esg/products#esg-relevance-scores.

Información adicional está disponible en www.fitchratings.com

ESTADO DE PARTICIPACIÓN
La entidad calificada (y/o sus agentes) o, en el caso de finanzas estructuradas, una o más de las partes de la transacción participaron en el proceso de calificación, excepto que los siguientes emisores, si los hubiere, no participaron en el proceso de calificación. , o proporcionar información adicional, más allá de la divulgación pública disponible del emisor.

MODELOS APLICABLES
Los números entre paréntesis que acompañan a los modelos aplicables contienen hipervínculos a criterios que proporcionan una descripción de los modelos.

  • Country Ceiling Model, v2.0.1 (1)
  • Debt Dynamics Model, v1.3.2 (1)
  • Macro-Prudential Indicator Model, v1.5.0 (1)
  • Sovereign Rating Model, v3.14.1 (1)

DIVULGACIONES ADICIONALES

ESTADO DE RESPALDO
Panamá Respaldado por la UE, Respaldado por el Reino Unido
DESCARGO DE RESPONSABILIDAD Y DIVULGACIONES
Todas las calificaciones crediticias de Fitch Ratings (Fitch) están sujetas a ciertas limitaciones y exenciones de responsabilidad. Lea estas limitaciones y exenciones de responsabilidad siguiendo este enlace:

https://www.fitchratings.com/understandingcreditratings. In addition, the following https://www.fitchratings.com/rating-definitions-document details Fitch’s rating definitions for each rating scale and rating categories, including definitions relating to default.

Por admin

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