MAPFRE Panamá cerró el tercer trimestre de 2025 con primas netas emitidas por 188.7 millones de dólares, lo que representa una disminución interanual del 1.9% en comparación con el mismo periodo de 2024. Este escenario ha posicionado a la compañía como la tercera en el ranking del mercado asegurador panameño, con una participación de mercado del 12.72% al mes de septiembre 2025.
La rentabilidad del negocio fue uno de los puntos más destacados del periodo, con una utilidad después de impuesto de 8.4 millones de dólares, lo que supone un crecimiento del 61.4% con relación al tercer trimestre de 2024. Esta evolución favorable responde a una estricta gestión técnica y operativa de sus líneas de negocio más rentables.
En términos de eficiencia operativa, MAPFRE logró mantener un ratio combinado neto de no vida del 96.4%. Además, el retorno sobre fondos propios (ROE) se ubicó en un 10.3%, un indicador que evidencia la solidez financiera y la capacidad de la compañía para generar valor sostenible para sus accionistas.
Los ramos que impulsaron el comportamiento positivo en el portafolio fueron fianzas, vida (individual y colectivo) y ramos generales, los cuales muestran crecimientos respecto al año anterior. Esta dinámica refleja tanto una recuperación en la demanda de seguros corporativos como una mayor penetración en el segmento masivo.
Durante 2024, la compañía había cerrado con primas totales por 260.5 millones de dólares y 8 millones en beneficios, cifras que sentaron las bases para un 2025 con expectativas conservadoras pero sostenidas.
Escena global
La aseguradora cerró los primeros nueve meses de 2025 con un beneficio neto de 829 millones de euros (aproximadamente 883 millones de dólares), lo que representa un incremento del 26,8% respecto al mismo periodo del año anterior. Las primas aumentaron un 3,5%, alcanzando los 22.384 millones de euros (unos 23.837 millones de dólares), y el ratio combinado de No Vida mejoró en 2,2 puntos porcentuales, situándose en un 92,6%, reflejo de una gestión técnica eficiente y una mayor contribución del resultado financiero. Esta solidez se reafirma en un ROE del 12,4% (que sin extraordinarios sería 13,3%), y en la capacidad del Grupo para elevar el dividendo a cuenta hasta los 7 céntimos brutos por acción (+7,7%). Si se consideran efectos de moneda, el crecimiento de primas a tipos de cambio constantes habría sido del 7,8%, evidenciando la fortaleza del negocio asegurador en todos sus mercados pese al entorno macroeconómico y la volatilidad cambiaria.
Contribución regional
Latinoamérica aportó 340 millones de euros (aproximadamente 362 millones de dólares) al beneficio neto del Grupo, un 11,3% más que en el mismo periodo del año anterior, gracias a una buena evolución tanto técnica como financiera, destacando Brasil por su papel motor, a pesar del impacto de la depreciación de monedas regionales. Además, el bloque de «Resto Latam» —donde se integran geografías clave como México, Perú, Colombia y Panamá— alcanzó un resultado neto de 141 millones de euros, con un ratio combinado que mejora hasta 96,0 y un crecimiento relevante de primas en moneda local. Esta dinámica regional, caracterizada por disciplina técnica y foco en rentabilidad, impulsa la mejora sostenida de la operativa en los principales mercados del continente.
“En línea con lo previsto en el Plan Estratégico, un trimestre más crecemos de forma rentable en todas las regiones y líneas de negocio. La sólida evolución de la compañía nos permite aumentar por cuarta vez consecutiva el dividendo que abonamos a nuestros accionistas”, afirma Antonio Huertas, presidente de MAPFRE.
Actualmente, MAPFRE en Panamá presta servicios a más de 243 mil clientes a través de una red de más de 800 corredores, 9 oficinas distribuidas en todo el país y una estructura interna conformada por 369 colaboradores. A esto se suma una red de más de 1,000 proveedores, lo que permite ofrecer respuestas ágiles y personalizadas en cada línea de negocio.
Nota de Prensa | Panamá Banking News publica este contenido tal como fue enviado por la empresa o institución emisora. No representa una valoración editorial. La responsabilidad del contenido recae exclusivamente en el remitente.